En la previa al inicio del Mundial de Clubes 2025, que se disputará por primera vez bajo un nuevo formato en Estados Unidos, la FIFA publicó un informe detallando el palmarés oficial de los equipos participantes, entre ellos Boca Juniors y River Plate, los dos representantes del fútbol argentino. Con ello, la entidad global puso fin a un largo debate en Argentina sobre la cantidad de títulos de Primera División que corresponden oficialmente a cada club, incluyendo o no los obtenidos en la era amateur.

Según el informe de la FIFA, Boca Juniors acumula 35 campeonatos de Primera División, comenzando por el título ganado en 1920. Además, se destacan sus seis Copas Libertadores, tres Copas Argentina y dos Copas Sudamericana. A nivel internacional, la FIFA también resalta que Boca es uno de los cinco equipos que ha logrado conquistar la Copa Intercontinental en tres ocasiones.

En cuanto a River Plate, la FIFA le reconoce 38 campeonatos locales, de los cuales 37 son de la etapa profesional y uno corresponde al amateurismo (el de 1920). “River es el club más exitoso de Argentina, con 38 títulos de Primera División”, subraya el informe. La entidad también destaca las cuatro Copas Libertadores de River, incluida la última obtenida en 2018 ante Boca, y tres Copas Argentina.

Un dato curioso en la presentación de River Plate está relacionado con su ubicación geográfica. Aunque el club siempre se ha asociado con el barrio de Núñez, la FIFA aclara que, según los límites cartográficos oficiales, el estadio Monumental se encuentra en el límite entre los barrios de Núñez y Belgrano, dentro de los márgenes administrativos de este último.

Este informe no solo establece cifras oficiales, sino que también actúa como un referente en la discusión sobre cómo unificar los logros del amateurismo y el profesionalismo en el fútbol argentino. La inclusión de títulos anteriores a 1931 —cuando comenzó el profesionalismo— había sido objeto de debate durante décadas entre historiadores, clubes y dirigentes.

Con este reconocimiento oficial, la FIFA refuerza su criterio de contabilizar todos los títulos nacionales de Primera División como parte de una única línea histórica, lo que podría poner fin, al menos desde el punto de vista estadístico, a una de las polémicas más persistentes en el fútbol argentino.