El Banco de México (Banxico) finalmente redujo su tasa de interés por primera vez en tres años, dejándola en 11 por ciento a partir del próximo viernes 22 de marzo.
La decisión, no unánime, contó con el voto a favor de la subgobernadora Irene Espinosa para mantenerla en 11.25 por ciento. Esta medida, esperada por expertos, llega después de que la institución cambiara su tono en febrero, indicando que evaluaría ajustar la tasa en función del panorama inflacionario y los desafíos actuales.
El último recorte había sido en febrero de 2021, en un contexto donde la inflación se disparó tras los niveles bajos provocados por la pandemia de COVID-19. Este ajuste, que comenzará a regir el viernes, influirá en las tasas de interés de largo plazo de créditos y depósitos bancarios, siendo una respuesta a la desaceleración de la inflación y un cambio en la postura monetaria.
La gobernadora del Banxico, Victoria Rodríguez, había señalado anteriormente que los ajustes serían graduales y que no marcarían el inicio de un ciclo bajista.