El peso mexicano y la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) continuaron su tendencia a la baja por tercer día consecutivo, sumándose a una ola global de incertidumbre al riesgo que se desató luego de que la agencia de calificación Fitch rebajara inesperadamente la nota crediticia de Estados Unidos.

El peso ya cotiza en 17.02 por dólar, registrando una depreciación del 0.87% frente al precio de referencia de Reuters de ayer. Esta devaluación fue similar a la que experimentaron otras monedas de la región, mostrando el impacto negativo de las condiciones globales en el mercado cambiario mexicano.

Analistas financieros, como los del Banco Base, han destacado que desde un punto de vista técnico, los indicadores sugieren la posibilidad de un cambio de tendencia en el tipo de cambio del peso frente al dólar. Esto podría llevar a una depreciación adicional del peso hasta alcanzar un nivel de aproximadamente 17.80 pesos por dólar. Sin embargo, también se espera que esta situación de nerviosismo y volatilidad disminuya con el tiempo, lo que podría llevar a una posterior recuperación del peso frente al dólar.

Por otro lado, en el mercado bursátil mexicano, el Índice De Precios y Cotizaciones registró una caída del 1.71%, cerrando en 53 mil 283.56 puntos. Este retroceso fue influenciado por el desempeño negativo de los mercados en el exterior y se vio reflejado en la disminución del valor de diversas acciones, siendo las de la minera Industrias Peñoles y del gigante de medios Grupo Televisa algunas de las más afectadas.

En cuanto al mercado de deuda, los bonos a 10 y 20 años también experimentaron alzas en sus rendimientos, reflejando la cautela de los inversionistas frente al panorama económico tanto a nivel nacional como internacional.

La incertidumbre generada por la rebaja de la calificación de Estados Unidos y otros factores globales han llevado a una fase de volatilidad en los mercados financieros de México. Sin embargo, se espera que las autoridades y analistas continúen monitoreando de cerca la situación y que las políticas económicas y financieras implementadas por el país contribuyan a mitigar los efectos adversos y propiciar una estabilidad gradual en los mercados nacionales.